Segmentación social que reproduce el Aporte Fiscal Indirecto, visión de los funcionarios ante las movilizaciones y críticas ante la actual conducción del movimiento estudiantil a nivel nacional fueron alguno de los temas abordados en el foro triestamental realizado en el Salón de Bachilerato, que contó con la presencia de un amplio margen de público de estudiantes de toda la USACH.
Por Equipo de Comunicaciones
En el salón de Bachillerato se realizó el jueves 5 de junio un foro triestamental programado originalmente en el casino de la EAO, organizado por los estudiantes de dicho plan de estudios, con la finalidad de debatir y socializar las propuestas y reflexiones provenientes de los diversos integrantes que conforman la USACH.
El encuentro, que comenzó a las 14:30 horas , contó con la participación del director de dicho plan de estudios, Francisco Javier Gil –quien aclaró que participa como ciudadano y no como autoridad universitaria-, Genaro Arriagada, Presidente de la AFUSACH y un representante de la FEUSACH.
La Batalla por eliminar el AFI
El profesor Gil fue el primero en iniciar la ronda de palabras, abordando el tema que mejor maneja relacionado con políticas educacionales: el Aporte Fiscal Indirecto.
Este mecanismo, que “premia” a los mejores alumnos de acuerdo al puntaje que tienen, a juicio del académico, genera una fuerte brecha y segmentación social, ya que premia a los “mejores” no de acuerdo a sus capacidades o aptitudes, sino acorde a la posibilidad que tengan de responder una buena PSU –antes PAA-, factor ligado con la condición socioeconómica de la que provenga el alumno.
El profesor agrega, que este análisis no es producto de un análisis subjetivo ni personal sobre el problema, sino basado en cifras y estudios que lo respaldan, como, por ejemplo, el dato de que los colegios municipales y subvencionados sacan en promedio 400 puntos, en cambio, los particulares alrededor de 600 puntos, lo que confirma su ácido diagnostico.
El profesor Gil agrega que en la época de la PAA, en la década de los ochenta, se decide subir la ponderación de esta prueba de un 40 a un 60%, lo que dejó fuera del sistema universitario a más de 10.000 jóvenes.
Además, señala que desde 1992 ha intentado modificar el AFI en diversas comisiones del parlamento. Incluso, lee un párrafo de un documento oficial de esa época, en donde se asegura que modificarlo “es impostergable”.
Apoyo de los funcionarios
El presidente de la AFUSACH, Genaro Arriagada, señala que los funcionarios son aliados de las movilizaciones estudiantiles, ya que comparten los planteamientos de fondo del movimiento, que apela a modificar radicalmente la lógica mercantilista de la educación.
Arriagada señala que ha participado en diversas comisiones del Senado en donde se analiza el tema de un “nuevo trato hacia las universidades", sobre todo, las pertenecientes al Consorcio de Universidades Estatales, que por su carácter público –al menos en el discurso- deberían tener finalides y objetivos diferentes al de universidades privadas.
El líder de los funcionarios señala que su compromiso con el movimiento no pasa sólo por un tema basado en conceptos abstractos, sino también en la vitalidad del día a día, ya que asegura conocer el esfuerzo que realizan los estudiantes para estudiar.
En sus críticas, sin embargo, no lanza sus dardos sólo al rol ausente del Estado relacionado con sus universidades, sino en la mala administración y gestión que han tenido diversas autoridades al momento de conducir los hilos de las casas de estudios estatales, incluyendo, por cierto, a la Universidad de Santiago. En donde –asegura- que hay gente que no está comprometido con el espíritu universitario, lucrando con proyectos de investigación y con los relacionados con asistencia técnica.
Buen trabajo de base, pero..
El representante de la FEUSACH enfoca su discurso enfocado en las políticas educacionales que rebalsan la problemática coyuntural de la discusión de la Ley General de Educación (LGE), que tiene paralizado a la casi totalidad del sistema público.
Asimismo, realiza una crítica relacionada con el tipo de conducción que está llevando el movimiento a nivel nacional, señalando que no existe una orientación clara que permita que los diversos peritorios internos de cada plantel y colegio confluyan en una pauta programática común.
Pese a esto, celebra el nivel de organización que se ha generado a nivel de las bases, el que –a juicio del estudiante- ha sido superior al presente en otras movilizaciones dentro de la universidad.
Bonificación objetada por el Consejo de Rectores
Otro de los temas abordados, que surge debido a una pregunta de uno de los asistentes a la charla, tiene que ver con socializar la experiencia del propedéutico desarrollado por el profesor Gil en Bachillerato y puesto en práctica desde el 2007.
El profesor Gil señala que la idea de este proyecto es defender y poner en práctica la idea de que los talentos están distribuidos de igual forma entre ricos y pobres.
El académico pone como ejemplo otras experiencias que se realizaron dentro de la USACH hacia una mayor inclusión social, como el caso de la bonificación de un 5% a las notas de los mejores alumnos de colegios municipales. Gil señala que gracias a esto más de 15 mil alumnos pudieron ingresar a la USACH.
Sin embargo, esta iniciativa, que se mantuvo desde 1992 hasta 2004, fue objetado por el Consejo de Rectores (CRUCH), basado en un informe de la Universidad de Chile, en donde se señalaba que el cálculo para detectar esos mejores alumnos demoraba tres días, lo que dificultaba masificarlo a otros planteles, recomendando eliminarlo.
Gil plantea que eso nunca tuvo mucho sentido, ya que a través de un simple computador esos alumnos se pueden detectar en tres minutos, lo que lo lleva a esbozar una doble intención en el informe “técnico” de la U de Chile.
Lo curioso es que varias universidades privadas comenzaron a copiar el sistema, como la Alberto Hurtado, que incluye un sistema de bonificación similar al que existía en la USACH.
Propedéutico: un avance hacia mayor inclusión social
En relación al propedéutico, el profesor Gil señala que aún puede considerarse como una experiencia piloto. Esta consiste, específicamente, en becar al 10% superior de los liceos prioritarios, los que cuentan con un bajo nivel en el SIMCE y en los que la USACH colabora estrechamente. Ellos asisten regularmente al propedéutico, en donde reciben asignaturas diversas, que complementan y refuerzan sus conocimientos recibidos en el colegio. De esos jóvenes, 45 ingresaron a Bachillerato este año.
El profesor agrega que todas las universidades a nivel nacional deberían tener sistemas de admisión mixto, si se quiere, por supuesto, avanzar hacia una mayor igualdad social. Además, realiza un público reconocimiento a las actuales autoridades de la universidad, ya que en el 2004, con la administración de Ubaldo Zúñiga, no existió apoyo hacia esta iniciativa. “Aprendimos –con la administración anterior- que la justicia no sirve para nada” –sentencia Gil-.
Contra la estructura social: inteligencia
La intervención de un estudiante de Ingeniería Física genera un interesante debate sobre las desigualdades que muestra el SIMCE dentro del sistema educacional y el rol que juegan los profesores en esta situación, a los que acusa de poco compromiso, sobre todo a los que poseen mayores conocimientos.
El presidente de la AFUSACH señala que, en el caso de las universidades públicas, los cuadros están envejecidos –lo que también pasa en los colegios- lo que a su juicio se traduce en un desgaste lógico de su labor como docentes. Pone el ejemplo de la Universidad de Santiago, en donde hay 4550 personas que, por edad, ya deberían estar jubilados.
El profesor Gil, por su parte, señala que contra la violencia de la estructura social hay que usar la inteligencia. Además, critica duramente la lógica con la cual ha funcionado el Ministerio de Educación al enfrentar los problemas en el área, señalando que para ellos siempre es plata: nunca aparecen los alumnos ni en los documentos ni menos en el discurso. “Los expertos en educación hablan de los alumnos como si fueran sillas” –asegura Gil-.
Finaliza su intervención focalizando el problema en el ámbito motivacional. Pone el ejemplo de los jóvenes de cuarto medio. “¿Para qué van a estudiar? Hay colegios en que ningún niño va a llegar a la universidad: cuando no hay motivación la calidad educacional baja altiro. Además, en los casos en que tienen posibilidades de entrar, es mucho más rentable ir a un preuniversitario que estudiar en el colegio” -señala-.
Inculcando el derecho a estudiar
El joven que hizo la pregunta señaló que desviaron el foco de su pregunta, que se centraba en el rol de los profesores en la calidad de la educación.
Un profesor que estaba como espectador de la charla decide responderle, señalando que ellos no suelen hacer mucha publicidad en las actividades que realizan. En su caso, asegura que si trabaja en colegios de bajos rendimientos. Incluso, menciona una experiencia suya en Chaitén hace unos años, en donde, paradójicamente, una niña de 3 años le explicaba el funcionamiento de un volcán.
Además, menciona que en Cuba, en donde ha estado como turista y residente, en donde existen carencias materiales gigantescas, si hay una preocupación sobre el rol que debe jugar la educación dentro de la sociedad. Ejemplifica con el caso de la Universidad Camilo Cienfuegos, ya que los miembros de esa casa de estudios van a los pueblos a educar a las personas de diferentes edades, inculcando el derecho a estudiar como algo prioritario.
La dilatada triestamentalidad
En relación al tema de la participación de la comunidad universitaria, el profesor Gil, a modo personal, señaló que apoyará y votará por la propuesta que otorgue el máximo grado de participación a todos los estamentos.
El representante de la FEUSACH plantea que existen las propuestas que deben ser prontamente votadas, lo que implica un importante avance hacia una mayor democracia en la universidad.
Ante algunas inquietudes sobre la fecha de la votación, asegura no saber cuando se realizará, ya que originalmente, esta debía efectuarse en el mes de Abril.
El profesor que se encontraba como asistente señaló la importancia de contactarse con Alejandro Yañez para discutir el estatuto orgánico que permita la triestamentalidad, ya que el fue uno de los dirigentes que participó en el histórico estatuto de los años 70 que culminó con la elección democrática del rector Enrique Kirberg.
Por Equipo de Comunicaciones
En el salón de Bachillerato se realizó el jueves 5 de junio un foro triestamental programado originalmente en el casino de la EAO, organizado por los estudiantes de dicho plan de estudios, con la finalidad de debatir y socializar las propuestas y reflexiones provenientes de los diversos integrantes que conforman la USACH.
El encuentro, que comenzó a las 14:30 horas , contó con la participación del director de dicho plan de estudios, Francisco Javier Gil –quien aclaró que participa como ciudadano y no como autoridad universitaria-, Genaro Arriagada, Presidente de la AFUSACH y un representante de la FEUSACH.
La Batalla por eliminar el AFI
El profesor Gil fue el primero en iniciar la ronda de palabras, abordando el tema que mejor maneja relacionado con políticas educacionales: el Aporte Fiscal Indirecto.
Este mecanismo, que “premia” a los mejores alumnos de acuerdo al puntaje que tienen, a juicio del académico, genera una fuerte brecha y segmentación social, ya que premia a los “mejores” no de acuerdo a sus capacidades o aptitudes, sino acorde a la posibilidad que tengan de responder una buena PSU –antes PAA-, factor ligado con la condición socioeconómica de la que provenga el alumno.
El profesor agrega, que este análisis no es producto de un análisis subjetivo ni personal sobre el problema, sino basado en cifras y estudios que lo respaldan, como, por ejemplo, el dato de que los colegios municipales y subvencionados sacan en promedio 400 puntos, en cambio, los particulares alrededor de 600 puntos, lo que confirma su ácido diagnostico.
El profesor Gil agrega que en la época de la PAA, en la década de los ochenta, se decide subir la ponderación de esta prueba de un 40 a un 60%, lo que dejó fuera del sistema universitario a más de 10.000 jóvenes.
Además, señala que desde 1992 ha intentado modificar el AFI en diversas comisiones del parlamento. Incluso, lee un párrafo de un documento oficial de esa época, en donde se asegura que modificarlo “es impostergable”.
Apoyo de los funcionarios
El presidente de la AFUSACH, Genaro Arriagada, señala que los funcionarios son aliados de las movilizaciones estudiantiles, ya que comparten los planteamientos de fondo del movimiento, que apela a modificar radicalmente la lógica mercantilista de la educación.
Arriagada señala que ha participado en diversas comisiones del Senado en donde se analiza el tema de un “nuevo trato hacia las universidades", sobre todo, las pertenecientes al Consorcio de Universidades Estatales, que por su carácter público –al menos en el discurso- deberían tener finalides y objetivos diferentes al de universidades privadas.
El líder de los funcionarios señala que su compromiso con el movimiento no pasa sólo por un tema basado en conceptos abstractos, sino también en la vitalidad del día a día, ya que asegura conocer el esfuerzo que realizan los estudiantes para estudiar.
En sus críticas, sin embargo, no lanza sus dardos sólo al rol ausente del Estado relacionado con sus universidades, sino en la mala administración y gestión que han tenido diversas autoridades al momento de conducir los hilos de las casas de estudios estatales, incluyendo, por cierto, a la Universidad de Santiago. En donde –asegura- que hay gente que no está comprometido con el espíritu universitario, lucrando con proyectos de investigación y con los relacionados con asistencia técnica.
Buen trabajo de base, pero..
El representante de la FEUSACH enfoca su discurso enfocado en las políticas educacionales que rebalsan la problemática coyuntural de la discusión de la Ley General de Educación (LGE), que tiene paralizado a la casi totalidad del sistema público.
Asimismo, realiza una crítica relacionada con el tipo de conducción que está llevando el movimiento a nivel nacional, señalando que no existe una orientación clara que permita que los diversos peritorios internos de cada plantel y colegio confluyan en una pauta programática común.
Pese a esto, celebra el nivel de organización que se ha generado a nivel de las bases, el que –a juicio del estudiante- ha sido superior al presente en otras movilizaciones dentro de la universidad.
Bonificación objetada por el Consejo de Rectores
Otro de los temas abordados, que surge debido a una pregunta de uno de los asistentes a la charla, tiene que ver con socializar la experiencia del propedéutico desarrollado por el profesor Gil en Bachillerato y puesto en práctica desde el 2007.
El profesor Gil señala que la idea de este proyecto es defender y poner en práctica la idea de que los talentos están distribuidos de igual forma entre ricos y pobres.
El académico pone como ejemplo otras experiencias que se realizaron dentro de la USACH hacia una mayor inclusión social, como el caso de la bonificación de un 5% a las notas de los mejores alumnos de colegios municipales. Gil señala que gracias a esto más de 15 mil alumnos pudieron ingresar a la USACH.
Sin embargo, esta iniciativa, que se mantuvo desde 1992 hasta 2004, fue objetado por el Consejo de Rectores (CRUCH), basado en un informe de la Universidad de Chile, en donde se señalaba que el cálculo para detectar esos mejores alumnos demoraba tres días, lo que dificultaba masificarlo a otros planteles, recomendando eliminarlo.
Gil plantea que eso nunca tuvo mucho sentido, ya que a través de un simple computador esos alumnos se pueden detectar en tres minutos, lo que lo lleva a esbozar una doble intención en el informe “técnico” de la U de Chile.
Lo curioso es que varias universidades privadas comenzaron a copiar el sistema, como la Alberto Hurtado, que incluye un sistema de bonificación similar al que existía en la USACH.
Propedéutico: un avance hacia mayor inclusión social
En relación al propedéutico, el profesor Gil señala que aún puede considerarse como una experiencia piloto. Esta consiste, específicamente, en becar al 10% superior de los liceos prioritarios, los que cuentan con un bajo nivel en el SIMCE y en los que la USACH colabora estrechamente. Ellos asisten regularmente al propedéutico, en donde reciben asignaturas diversas, que complementan y refuerzan sus conocimientos recibidos en el colegio. De esos jóvenes, 45 ingresaron a Bachillerato este año.
El profesor agrega que todas las universidades a nivel nacional deberían tener sistemas de admisión mixto, si se quiere, por supuesto, avanzar hacia una mayor igualdad social. Además, realiza un público reconocimiento a las actuales autoridades de la universidad, ya que en el 2004, con la administración de Ubaldo Zúñiga, no existió apoyo hacia esta iniciativa. “Aprendimos –con la administración anterior- que la justicia no sirve para nada” –sentencia Gil-.
Contra la estructura social: inteligencia
La intervención de un estudiante de Ingeniería Física genera un interesante debate sobre las desigualdades que muestra el SIMCE dentro del sistema educacional y el rol que juegan los profesores en esta situación, a los que acusa de poco compromiso, sobre todo a los que poseen mayores conocimientos.
El presidente de la AFUSACH señala que, en el caso de las universidades públicas, los cuadros están envejecidos –lo que también pasa en los colegios- lo que a su juicio se traduce en un desgaste lógico de su labor como docentes. Pone el ejemplo de la Universidad de Santiago, en donde hay 4550 personas que, por edad, ya deberían estar jubilados.
El profesor Gil, por su parte, señala que contra la violencia de la estructura social hay que usar la inteligencia. Además, critica duramente la lógica con la cual ha funcionado el Ministerio de Educación al enfrentar los problemas en el área, señalando que para ellos siempre es plata: nunca aparecen los alumnos ni en los documentos ni menos en el discurso. “Los expertos en educación hablan de los alumnos como si fueran sillas” –asegura Gil-.
Finaliza su intervención focalizando el problema en el ámbito motivacional. Pone el ejemplo de los jóvenes de cuarto medio. “¿Para qué van a estudiar? Hay colegios en que ningún niño va a llegar a la universidad: cuando no hay motivación la calidad educacional baja altiro. Además, en los casos en que tienen posibilidades de entrar, es mucho más rentable ir a un preuniversitario que estudiar en el colegio” -señala-.
Inculcando el derecho a estudiar
El joven que hizo la pregunta señaló que desviaron el foco de su pregunta, que se centraba en el rol de los profesores en la calidad de la educación.
Un profesor que estaba como espectador de la charla decide responderle, señalando que ellos no suelen hacer mucha publicidad en las actividades que realizan. En su caso, asegura que si trabaja en colegios de bajos rendimientos. Incluso, menciona una experiencia suya en Chaitén hace unos años, en donde, paradójicamente, una niña de 3 años le explicaba el funcionamiento de un volcán.
Además, menciona que en Cuba, en donde ha estado como turista y residente, en donde existen carencias materiales gigantescas, si hay una preocupación sobre el rol que debe jugar la educación dentro de la sociedad. Ejemplifica con el caso de la Universidad Camilo Cienfuegos, ya que los miembros de esa casa de estudios van a los pueblos a educar a las personas de diferentes edades, inculcando el derecho a estudiar como algo prioritario.
La dilatada triestamentalidad
En relación al tema de la participación de la comunidad universitaria, el profesor Gil, a modo personal, señaló que apoyará y votará por la propuesta que otorgue el máximo grado de participación a todos los estamentos.
El representante de la FEUSACH plantea que existen las propuestas que deben ser prontamente votadas, lo que implica un importante avance hacia una mayor democracia en la universidad.
Ante algunas inquietudes sobre la fecha de la votación, asegura no saber cuando se realizará, ya que originalmente, esta debía efectuarse en el mes de Abril.
El profesor que se encontraba como asistente señaló la importancia de contactarse con Alejandro Yañez para discutir el estatuto orgánico que permita la triestamentalidad, ya que el fue uno de los dirigentes que participó en el histórico estatuto de los años 70 que culminó con la elección democrática del rector Enrique Kirberg.
No hay comentarios:
Publicar un comentario